Virginia Díaz: “Hay que volver a acostumbrarse al agua”
Virginia Díaz (El Astillero, Cantabria 1998) logró junto a Aina Cid el primer billete del remo español para los Juegos de Tokio gracias a su quinta plaza en el dos sin timonel del Mundial de Linz-Ottensheim de agosto de 2019.
La pandemia mundial por el coronavirus aplazó el sueño olímpico de la pareja, que un par de meses antes se había proclamado campeona de Europa.
El inicio de la fase de desescalada ha permitido a la cántabra, afincada en Getxo (Bizkaia) desde hace ocho años, volver a entrenarse en el agua después de casi dos meses de confinamiento preparándose a base de ergómetro y pesas.
“El cuerpo se tiene que acostumbrar otra vez al agua. En una temporada normal no hay tiempo para que se quite el callo de la mano, pero ahora sí. Las manos se me han vuelto a romper. Además, hemos ido a correr después de mucho tiempo y hay agujetas”, confiesa Díaz en esta entrevista.
Pregunta (P): ¿Cómo ha llevado el confinamiento?
Respuesta (R): Ahora un poquito mejor. Hace unos días nos dieron permiso para salir a remar y cambia bastante. Hasta ahora entrenaba en casa con pesas y ergómetro y salir a remar en botes individuales te hace ver que poco a poco volvemos a la normalidad.
P: Habrá sido un soplo de aire fresco después de casi dos meses de confinamiento.
R: En casa es difícil llevarlo porque duermes, entrenas y comes en el mismo sitio. En un piso te agobias un poco más que en el exterior, que es a lo que estamos acostumbrados. Nos ha llevado un tiempo adaptarnos. He entrenado con mi pareja, y entrenador, y lo hemos llevado de la mejor manera.
P: ¿Cómo ha sido la vuelta al agua?
R: Como DAN (Deportista de Alto Nivel) tengo flexibilidad horaria y por las mañana voy a remar a la Ría (del Nervión) y por la tarde sigo con las pesas y el ergómetro. Los primeros días estoy haciendo menos kilometraje porque el cuerpo se tiene que acostumbrar otra vez al agua. En una temporada paramos dos o tres semanas y no hay tiempo para que se quite el callo de la mano, pero ahora sí. Las manos se me han vuelto a romper y lleva un tiempo que se endurezcan. Además, hemos ido a correr después de mucho tiempo y hay agujetas.
P: ¿Les han dado pautas específicas a los remeros?
R: De momento estoy entrenando sola. Solo podemos ir en botes individuales. Los otros compañeros federados que van al club (Raspas de Getxo) van en horarios diferentes. Hasta las siguientes fases tendremos que tener medidas más estrictas.
P: Entonces pasará un tiempo hasta que vuelva a remar con su compañera, Aina Cid.
R: El 11 de junio tienen previsto abrir los CAR, pero siguen las restricciones de bote individual y no nos merece la pena ir para entrenar solas. Cuando podamos salir por parejas las dos nos desplazaremos a Bañolas y allí sí empezaremos otra vez a remar juntas después de mucho tiempo.
P: Lograr el billete para los Juegos Olímpicos, ¿fue un sueño cumplido?
R: Ha habido años duros donde he trabajado, pero no se ha reflejado en el resultado. Todos los deportistas somos sacrificados y exigentes, soñamos con unos Juegos y nos ponemos metas altas. Conseguirlo es impresionante. A pesar de la situación que vivimos, saber que en algún momento estaremos allí te anima a seguir trabajando.
P: En su primer año juntas campeonas de Europa y billete olímpico. Han demostrado tener una buena química.
R: Sí. En pretemporada Aina iba de marca y yo en la popa, pero unas pocas semanas antes del Europeo cambiamos y salió muy bien. Para estar con los países de arriba queda mucho, pero se vio que es un bote con opciones de pelear.
P: ¿Cuál era su objetivo en Tokio?
R: El principal era estar en las finales. Los tiempos que veníamos haciendo hasta abril nos indicaban que íbamos por buen camino. Quedaba mucho margen hasta el verano y pensábamos estar en la final.
P: ¿Les puede beneficiar el aplazamiento?
R: Cuando me dijeron que se aplazaba mi cabeza buscó lo positivo. Somos una pareja muy nueva y el tener un año más de margen para prepararnos física y técnicamente y compenetrarnos nos beneficia, entre comillas, respecto a otras contrincantes que llevan más tiempo.
P: ¿Cuál es su hoja de ruta hasta los Juegos?
R: Tenemos en octubre el Europeo, que se aplazó en mayo. El 31 de julio se decide si se celebra. Hay dos planificaciones, si se hace o si no. El director técnico de la federación nos ha comentado que iríamos una o dos veces a Sierra Nevada en función de eso. Estaría bien acabar el año con una competición fuerte y un objetivo.
P: Además de remera de elite usted es graduada en Enfermería y estudiante de Medicina. ¿De dónde saca el tiempo?
R: Es complicado, pero la disciplina que tenemos los deportistas hace que nos ordenemos mucho. Hice Enfermería nada mas acabar el instituto, cuando era sub-23, y lo llevé mejor. Ahora dedico más tiempo al remo. Cojo pocas asignaturas y voy poco a poco, mis compañeros y los profesores me lo hacen más llevadero. Con los Juegos en mente me dedico exclusivamente a entrenar y del tiempo de descanso saco una o dos horas al día para seguir estudiando.