Kayaks y canoas se adueñan este sábado del Pisuerga

Alemania, una de las más fuertes a nivel europeo dentro del K-4, se une este año a las selecciones nacionales que participaban hasta ahora en el Gran Premio Internacional de Castilla y León, que celebra este fin de semana su sexta edición, en la Playa de las Moreras en Valladolid y en el Lago de Sanabria en Zamora, el domingo. Narciso Suárez, presidente de la Federación de Castilla y León de Piragüismo, aseguró durante la presentación ayer del gran premio, que se forma así «un triunvirato» junto con Hungría y con la República Checa, ganadora del año pasado.
La selección española compite esta edición con un equipo prácticamente nuevo, formado por el veterano palista palentino Jorge Alonso, Albert Corominas, Iván Alonso y Walter Bouzan. Los españoles buscan revalidar su victoria del año pasado en aguas vallisoletanas, pero añadirle la victoria en Sanabria. En esa ocasión, los checos se hicieron con la prueba zamorana y por tiempos se llevaron el Gran Premio. Las seis selecciones que participarán se completan con las formaciones de Gran Bretaña y Portugal.
A las jornadas de competición de las anteriores ediciones, sábado en Valladolid y domingo en Sanabria, se une este año una tercera, el viernes, también en Valladolid. Ese día se realizará un homenaje al desaparecido Juan Francisco Rodríguez, fundador del primer club en Valladolid, el club Cisne. Este reconocimiento del piragüismo castellano y leonés al palista e impulsor de este deporte en Valladolid constará del descubrimiento de una placa por parte del alcalde, Francisco Javier León de la Riva, en el edificio acristalado de la playa de las Moreras. La jornada del viernes se completará con una exhibición de la nueva distancia olímpica, 200 metros en la que participará el palentino Pablo Andrés, campeón de España en la distancia, junto con otros especialistas internacionales.
Jorge Alonso, componente de la selección española, participa por primera vez sin su compañero de toda la vida en el K-2, Santiago Guerrero. «Estuve desde 1999 compitiendo con él, Santi estaba cansado de la tensión de la competición y decidió retirarse». Sin embargo, si que viene a Valladolid su actual compañero, el catalán Albert Corominas, con el que ya ganó una competición nacional de la especialidad de maratón y consiguió un tercer puesto en la Copa del Mundo. «Nos compenetramos bien, nos falta mejorar sólo un poquito más», asegura Alonso, «sobre todo con vistas a el día 22 de agosto que es cuando nos jugamos la clasificación al Mundial de este año, que se celebra en España, en Bañolas». «Es de donde es Albert, así que tenemos un incentivo más», añade el palista.
Las competiciones del tipo del Gran Premio de Castilla y León le gustan al palentino por «lo rápido que puede ir el K-4 y por la búsqueda de la compenetración entre los piragüistas» a pesar de que a Corominas y a él les «va mal» porque vienen de maratón, una mayor distancia. «También tienen el atractivo de que la distancia se puede hacer en unos 20 minutos, y puedes mantener un ritmo muy alto todo el recorrido».
El foco central del Gran Premio es la competición entre selecciones nacionales, en la que todo el mundo está alerta sobre la formación que traerá Alemania, todavía desconocida. «Suponemos que si vienen será para hacer un buen papel», afirmó Narciso Suárez. Pero también competirán equipos nacionales, entre ellos el Escuela Aranjuez, representada con 8 kayaks. En total, el río Pisuerga verá ocupado su curso con 2 tandas de unas 35 embarcaciones cada una.