Los prácticos de puerto, el control por la seguridad
"Coja por la parte Norte de la boya de recalada", ordena el práctico al capitán del "Maersk Accra", mientras la embarcación "Carteya" se dirige rápida al encuentro del portacontenedores que se encuentra ya en medio de la Bahía de Algeciras. Desde que el práctico se embarca, la comunicación con el buque que demanda este servicio es prácticamente continua, a través del canal trece. Los primeros contactos se reciben en la sala de control, ubicada en unas modernas instalaciones en la estación marítima, donde las instrucciones las da el radioperador de servicio, en este caso María José Mateo.
En un primer contacto a través de VHF se recibe una primera información sobre el buque, sobre sus características: eslora, tonelaje, nacionalidad, si lleva carga o viene en lastre, etc.. "Vemos qué medios necesitamos para el atraque o el fondeo", indica Antonio Barba, presidente de la Corporación de Prácticos de Puerto de Algeciras. Dependiendo de su destino, se le indicará un rumbo determinado a seguir. También se concreta si la maniobra se va a hacer a babor o a estribor al muelle.
El "Maersk Accra" dispone de hélice de proa transversal, lo cual hace que este tipo de barcos requieran para la maniobra de atraque un único remolcador, y por tanto la maniobra se realiza de una forma determinada. Este tipo de hélice, como su nombre indica, permite al buque desplazarse transversalmente. Pero este no es el caso puesto que, tal y como ya informó previamente el capitán, esta hélice la lleva averiada y por eso reclamó dos remolcadores.
El "VB Siroco" y el "Simún" se dirigen a auxiliar al portacontenedor, al que desde la terminal se le ha asignado los puntos de atraque del 3 al 8 del muelle de Maersk SeaLand. "El remolcador de popa va a trabajar con retenida", dice Barba, quien explica que significa que va a tirar o empujar, dependiendo de lo que necesite. Estas embarcaciones tienen mucha maniobrabilidad.
El práctico de puerto es el encargado de dirigir y coordinar todo el tráfico marítimo. Pero también está a las órdenes del capitán marítimo para actuar ante una emergencia. Él es el primero que entra en contacto con el buque.
Mientras la "Carteya" va al encuentro del barco, Mateo se dirige por radio a los ferrys "Limadet" e "Ibn Batouta", que se se encuentran operando en la zona y a los que informa de la presencia del "Maersk Accra" en las aguas de la Bahía. La comunicación debe ser permanente con todos los barcos de la zona.
Marcos Socas es el práctico que está encargado del servicio con el "Maersk Accra". En la "Carteya" le acompaña al timón el marinero Carlos Elgarbay. Con la agilidad que caracteriza a estos profesionales, Socas sube por la escala de gato que tiene el barco a babor. Previamente nos explica que a primera vista el práctico puede hacerse una idea de cuál es la situación del buque: si la escala está en malas condiciones, si hay óxido, etc... Aunque está claro que ellos no son los inspectores, para eso está Capitanía, si localizan cualquier deficiencia importante informan de ello a la autoridad marítima. Una vez a bordo, el práctico recibe con más detalle información sobre el barco y se concreta la maniobra que requiere el destino del buque.
Normalmente, además del patrón de la embarcación de prácticos, suele ir otro marinero que es el que ayuda al práctico cuando sube o desciende del buque al que ha de atender, operación que se realiza sin detener la navegación.
Mientras que el remolcador de proa tira del portacontenedor, el otro le empuja y así llegan al atraque, sin novedad, donde una media hora después el práctico es recogido por la embarcación, ya con el servicio cumplido.
Mientras tanto, se recibe la notificación de que el "Apache One", un petrolero de 2.800 toneladas de registro bruto ha demandado también el servicio de practicaje. Este buque avisa que llegará en una media hora y que se dirige al muelle de Isla Verde, donde va a atracar a babor al muelle. De este nuevo servicio se encargará Antonio Barba.
El puerto Bahía de Algeciras, es uno de los más activos. Así lo refleja el continuo ir y venir de barcos, grandes y pequeños. Los prácticos suelen realizar al día ocho, nueve o diez maniobras. La mayoría de ellas están relacionadas con portacontenedores. Barba asegura que "lo normal es que cuando un barco va a salir tenga otros esperando" su hueco en la terminal. Esto ocurre en el 80 por ciento de los casos.
En refinería el trabajo es distinto, porque cuando llega un buque, lo habitual es que en esa zona haya un período de tranquilidad. Con los portacontenedores se requiere "mucho más celo por nuestra parte", porque estos buques están sometidos a horarios estrictos y deben cumplirlos a rajatabla. Barba se muestra muy satisfecho por el grado de cumplimiento de este servicio, que en su opinión funciona muy bien, aunque también reconoce que disponen de muy buenos medios: "El barco nos llama, e incluso llegamos cuando aún las grúas están trabajando", añade.
Cuatro prácticos y un quinto como retén se reparten el trabajo durante las 24 horas. Aunque todos se apoyan, tienen, por cuestión de régimen interno, asignados una zona, bien puerto, o refinería. Los turnos son rotatorios y van de 8 de la mañana a 9de la noche, uno, y de esa hora a las 8 de la mañana, otro. Los prácticos trabajan cuatro días en el turno de día, otros 4 en el de noche y otros tantos en refinería.
Además de ocho prácticos, la plantilla está integrada por nueve radioperadores, dos administrativos, catorce marineros y un mecánico. La flota está compuesta por dos embarcaciones de alta velocidad, "Navío" y "Carteya", y otras tres más de menor capacidad.
La Bahía dispone de tres zonas diferenciadas de practicaje: la "A", ubicada cerca de refinería, la "B", en el Norte del Dique de Abrigo, y la "C", denominada de practicaje asistido, en la que a los barcos se le asigna una zona (de fondeo) pero la maniobra la realizan sin práctico.