El uso conjunto de GNL y ‘cold ironing’ permite una reducción de un 50% de emisiones de CO2
20/11/2020 - El proyecto sueco-finlandés Bothnia Bulk, que aúna el uso del gas natural licuado (GNL) como combustible para dos buques graneleros junto con otras tecnologías a bordo y en tierra, ha logrado una significativa reducción del 50% de las emisiones de CO2 respecto a los buques convencionales, en una ruta marítima en el Báltico norte. Además, se reducen las emisiones de óxidos de azufre y de nitrógeno, y de materia particulada.
El objetivo de dicho proyecto, parcialmente financiado por la UE, era modernizar la flota que transporta material para la siderurgia entre los puertos de Luleå, Oxelösund y Raahe en el Báltico.
Como parte de este proyecto, la naviera finlandesa ESL Shipping recibió, en 2018, dos graneleros handysize —Viikki y Haaga— de 160 m de eslora y 26.000 tpm, propulsados a GNL que cuentan además con suministro eléctrico desde tierra en puerto. El suministro de combustible se efectúa mediante un camión cisterna a GNL. Los buques también podrán funcionar con biogás libre de carbono cuando esto sea posible.