Viviana García elegida presidenta del RC Náutico de Vigo por una clara mayoría
Voto de castigo a la gestión de la junta de Franco Cobas que pierde la confianza. A la nueva directiva le avalan el 68% de las papeletas emitidas, 685 contra 324. Votó el 25% del censo.
Viviana Beatriz García será la primera mujer que asume la presidencia del centenario Real Club Náutico de Vigo. Su aplastante victoria cierra la gestión de la junta que Franco Cobas dirigió desde 2004. Su equipo se constituirá como Junta Directiva de forma oficial el próximo 16 de noviembre.
La delicada situación económica a la que abocó las decisiones de la anterior directiva, la pérdida de masa social, y la obra faraónica del nuevo puerto deportivo que lastra la economía del club ha pasado factura a la directiva de Franco Cobas. De echo será este el gran caballo de batalla al que se tendrá que enfrentar Viviana y su equipo que en sus primeras declaraciones fueron: «Lo primero que haremos será una auditoría de la gestión". "Recuperar los 3.000 asociados que se han dado de baja en los últimos años". "Sabemos que se fueron a causa del descontento y eso queremos cambiarlo".
Dificil lo tiene la nueva directiva, las bajas de socios, el cierre del grifo de patrocinios y subvenciones, la entelequia de un club con dos tipos de asociados (accionistas y soios), la sequía del crédito y unas cuentas secas como la mojarra, con una deuda que según el último balance oficial -presentado a los socios en la junta ordinaria de mayo- eleva la deuda a 6,3 millones antoja que si el el Náutico fuese una empresa estaría ya liquidada.
Sin duda será una larga travesía, "austera" por el desierto y tendrán que poner muchas neuronas en el proyecto ya que el cierre de créditos que padece la entidad exige formulas creativas y apostar de forma decidida por reforzar su masa social. Revisar el futuro del puerto deportivo, obra que los proyectos de la anterior junta la convirtieron en "inviable" y llevaron a la pérdida de usuarios que emigraron a otras instalaciones de la ría.
La recuperación de estos, una nueva política de amarres, una buena gestión y más eficaz económicamente para el club de sus eventos deportivos (razón de ser social), renegociar los compromisos adquiridos, sin mentalidad millonaria, entendemos que serán la clave para que esta entidad con 106 años de vida, y que fue bandera náutica de Galicia, no desaparezca.