Un juez ordena la retirada de barcos del puerto de Calp por impago de amarres
La concesionaria de la explotación del puerto deportivo 'Puerto Blanco' de Calp inició ayer la retirada de los pantalanes de al menos diez embarcaciones que no han satisfecho los gastos del alquiler del pantalán o el pago de recibos de luz y agua y los depositó en el varadero.
Los propietarios con embarcaciones en este puerto deportivo afirmaron y reiteraron ayer que no habían visto ninguna orden judicial, que sólo les habían dicho que existe una carta de la Conselleria de Infraestructuras ordenando el desalojo de los pantalanes. Fuentes de la Conselleria, sin embargo, señalaron que la empresa concesionaria del puerto deportivo, Acintur Bahía, de Benidorm, "está sacando las barcas que no pagan los pantalanes y los gastos, apoyados en una orden judicial".
Las mismas fuentes de la Generalitat precisaron que ayer se retiraron diez embarcaciones y que si el juez comprueba que hay más en la misma situación de impago, "también serán retiradas con la pertinente orden judicial".
Los afectados, sin conocimiento previo descubrieron cómo una grúa de grandes dimensiones, escoltada por la Policía Autonómica y la Guardia Civil, comenzaba a sacar a tierra sus embarcaciones que permanecían amarradas a puerto, "por orden de la Conselleria", según les dijeron. Los trabajos se han llevado a cabo "sin justificación ni previo aviso a los afectados', según indicaron.
La actuación podría afectar a unos ochenta propietarios del puerto deportivo calpino, que sienten una "sensación de impotencia", según explicó Antonio Trives, propietario de embarcaciones y anterior gerente del puerto deportivo, puesto que "se trata de actos ilegales contra los que los propietarios no podemos hacer nada". Trives avanzó que van a poner denuncias por cohecho y prevaricación. Los afectados critican que la Conselleria esté actuando sin ningún tipo de notificación, sin ni siquiera mediar palabra con los afectados para darles a conocer los motivos que han llevado a tomar esta medida.
Según explica Antonio Trives, los agentes de la policía les aseguraron que tenían una carta de la Conselleria "como que pueden sacar las embarcaciones", y no ha habido más explicación. Trives asegura que la nueva concesionaria de Puerto Blanco ha incumplido prácticamente la totalidad del pliego de condiciones. "Lo único que han hecho es un repuesto de escollera, pero en lugar de usar roca de gran tonelaje han utilizado escombros de desmonte", explicó.
Estos hechos también fueron denunciados ante la Conselleria de Infraestructuras, comentó Trives, puesto que si el motivo por el que la Generalitat decidió cerrar el puerto deportivo era la falta de seguridad, recuerda el anterior gerente del club, "ahora la situación es peor, el puerto está en total situación de abandono, y existe una zona muy peligrosa".
Las instalaciones de Puerto Blanco fueron adjudicadas en 1983 a la empresa VAPF, con derecho a su explotación hasta 2022, a cambio de realizar una ampliación de las instalaciones. Pero la Conselleria le retiró la concesión por incumplimiento del contrato en febrero de 2007, y cerró el puerto por falta de seguridad en noviembre de ese mismo año.
En junio de 2008 adjudicó la concesión a Acintur Bahía por tres años a cambio de ejecutar la ampliación de las instalaciones hasta los 500 amarres. La inversión comprometida por la concesionaria supera los 600.000 euros y prevé la explotación de los pantalanes, de ahí que haya decidido retirar algunos barcos porque no han pagado sus cuotas.