A CUATRO VIENTOS Remodelación en el Real Club Náutico de Barcelona
Recientemente se ha llevado a cabo en el Real Club Náutico de Barcelona las obras de remodelación de la planta baja del edificio principal, decididas por la Junta Directiva presidida por Félix Escalas, después de una detenida consideración de su oportunidad.
El proyecto encomendado al estudio Air Projects, representado por Inés Rodríguez y Raúl Campderrich, va más allá en su alcance de lo que son obras de mantenimiento y mejora o la resolución de problemas de funcionalidad de las instalaciones.
El propósito actual de la Junta no sólo ha sido mejorar aspectos funcionales o estéticos, si no hacerlo de manera que realzara el carácter, la tradición y el espíritu del RCNB dando continuidad histórica a una tarea de la que nuestros socios a lo largo de más de cien años puedan sentirse orgullosos.
La Historia
En un Club que respeta sus tradiciones debemos recordar que el edificio actual, responde a un proyecto de 1958, ejecutado en 1962 e inaugurado en 1964, del arquitecto Francisco Mitjans i Miró, en el emplazamiento elegido por aquel entonces en la confluencia del Moll Bosch i Alsina (hoy Moll de la Fusta) con el Moll de Espanya. Francisco Mitjans concibió el edificio que conocemos, integrado en su entorno, el agua y el puerto, y organizado en terrazas que le dan horizontalidad y transparencia. Como otras obras emblemáticas del mismo arquitecto, el RCNB lo diseñó entre el estadio del Fútbol Club Barcelona y el edificio del Banco Atlántico en Balmes-Diagonal, fue entonces reflejo de modernidad y manifestación del estatus cultural de la época.
La sede del RCNB, se ha mantenido adecuadamente desde entonces, destacando recientemente la obra en 2011 en la primera planta, proyecto a cargo del arquitecto Josep Lluís Plá y el traslado, ya en 2015 y de la mano de Jordi Masllorens, de los vestuarios y gimnasio del edificio principal al deportivo, logrando así unos espacios amplios y de calidad, además de liberar una espléndida zona en la planta baja que el proyecto actual permite readaptar en su uso.
A Cuatro Vientos
Es así como conceptualmente se ha definido este proyecto que, consciente de un enclave privilegiado hecho de luz y mar, pretende revalorizar los elementos originales que le imprimieron su carácter al edificio en los años 60’ y dar a la obra sentido de continuidad histórica, como corresponde a los mejores valores de la tradición.
La actuación se ha materializado sobre todo en dos áreas: vestíbulo y nuevas salas. Éste, de mayores dimensiones, confluye con la salida al mar sin obstáculos que impidan la comunicación visual directa con barcos y pantalanes. De esta forma se constituye el eje principal entre el vestíbulo, arranque de la escalera elíptica, distribuidor al resto de nuevas salas y acceso a los pantalanes, por donde la luz circula de manera natural.
Se ha reservado, en un lugar visible del distribuidor, el emplazamiento para las placas que resalten el nombre de las empresas-patrocinador del Club como muestra de reconocimiento y merecida correspondencia por el apoyo que nos muestran.
Los nuevos espacio-sala tienen tres áreas que cubren adecuadamente las necesidades funcionales previstas: oficinas de Gerencia y Deportiva, Sala de reuniones, Aula de Formación Polivalente, Sala de televisión y Junior’s Club. Todas ellas, en consonancia con el proyecto, orientadas y con vista directa al mar, al varadero, a los pantalanes y barcos, en definitiva abiertos a la luz y transmitiendo el espíritu náutico que da su carácter al RCNB.
Decoración: materiales y mobiliario
La elección de materiales y mobiliario aúna la calidad y funcionalidad de éstos con el respeto por la historia y el carácter del proyecto original del edificio. En conjunto, la intención es que el socio se sienta como en casa y la institución mantenga una estética de continuidad reconocible.
El vestíbulo mantiene el mármol negro Marquina que se integra con el resto de los materiales utilizados. Los nuevos materiales, nobles y orgánicos como la madera de roble, la moqueta o el mosaico de vidrio blanco, consiguen una gran calidez y junto con los tejidos de lino que tamizan la luz natural, aportan a las estancias su carácter acogedor.
En cuanto a colores para moquetas y butacas, se ha seleccionado un gris oscuro matizado en azules y verdes que evoca el océano.
No falta en la propuesta el interés en el uso de elementos sostenibles como la iluminación LED, los dispositivos de detección de presencia, la climatización VRV de alto rendimiento, los cerramientos exteriores con vidrio doble bajo emisivo o la utilización de materiales reciclados como la moqueta, el mosaico, el linóleo o el tablón de anuncios.
Junior’s Club
Mención especial entre las nuevas salas merece el Junior’s Club, donde los más pequeños disfrutarán de un espacio propio, acondicionado y equipado para entretenimiento infantil que se ha trasladado desde su anterior emplazamiento en el Edificio Deportivo del varadero al Edificio Principal.
Está situado junto a la Sala de Metopas y con vistas a los pantalanes del Club y por lo tanto disfruta de luz natural. Los materiales, decoración y mobiliario están en consonancia con los utilizados en el resto de los espacios y salas y los detalles de acabado le confieren a esta sala tan singular la calidez y el atractivo buscados.
El resultado de la remodelación es una razón más para sentir no sólo lo confortable y funcional del uso de las nuevas instalaciones, sino el íntimo orgullo de ser socio del Real Club Náutico de Barcelona.