La navegación privada se abre paso en el mercado ante la "falta" de puntos de atraque en Andalucía
La crisis provoca que muchos aficionados a este deporte no puedan pagar el mantenimiento y cedan el barco a cambio de rentabilidad
La navegación privada, a través de clubes de navegación, se está abriendo paso en el mercado náutico, entre otros motivos por la "falta" de puntos de atraque en Andalucía. Además, la crisis económica está provocando que muchos aficionados a esta práctica no puedan pagar el mantenimiento y cedan sus barcos a cambio de rentabilidad.
En Málaga el pasado otoño nació Incruiser, una empresa creada por un aficionado a la náutica que ante los "problemas" de amarres, por el alto coste que suponen, abrió este club, que permite, previo un pago anual de unos 6.000 euros, navegar cuatro veces al mes, sin tener que costear el barco, el mantenimiento del mismo y el punto de atraque.
En los pocos meses de andadura el número de clientes se está incrementando. Actualmente cuenta con una veintena, que llegarán a más de 60 en pocos meses; y ocho delegaciones en diversos puntos de España --Madrid, Mallorca, Barcelona, Valencia, Marbella o Ciudad Real, entre otras--.
"A pesar de que la situación económica no es la mejor sí van entrando clientes tímidamente", manifestó el creador de Incruiser, José Manuel Gómez, y añadió que actualmente la flota es de 11 barcos, cantidad que se elevará a 25 en el mes de junio próximo; siendo el número de empleos generados de unos 40.
Gómez señaló que el precio permite navegar cuatro veces mensuales, "que es lo máximo que cualquier navegante sale", y suele coincidir con los fines de semana. No obstante, en los últimos tiempos se ha incrementado también los viernes para los procedentes de Madrid.
"Allí tenemos oficina propia y muchos cogen el AVE y pasan el fin de semana navegando en Málaga", precisó, y agregó que a este socio se le aporta también el traslado al hotel, el alojamiento y el tren, con precios especiales. "Damos más que el simple barco", apostilló.
En este sentido, la oferta de Incruiser se plantea casi como un paquete turístico. De hecho, Gómez informó de que a la Junta de Andalucía "le ha gustado" y está estudiando la promoción conjunta a través de las oficinas de turismo del Gobierno andaluz. Entre otros motivos porque Incruiser ha creado también rutas turísticas para promocionar la cultura, gastronomía, el paisaje o el ocio, entre otros segmentos.
BARCOS CEDIDOS
Curiosamente, la mayoría de los clientes de esta empresa malagueña proceden del interior de España, de ciudades como Madrid, Zaragoza o Ciudad Real, así como de Granada y Córdoba. La reciente apertura de la oficina en Marbella busca al cliente extranjero, de hecho, en pocos días más de medio centenar de personas han preguntado por este club de navegación.
Gómez calificó de "trágica" la falta de puntos de atraque en Málaga, Granada y Almería, zonas turísticas con más recorrido. Sin embargo, en Cádiz y Huelva, "están muy bien porque son instalaciones más modernas".
A pesar de esta falta de atraques en la actualidad, debido a la crisis económica, hay un mayor número de ellos disponibles. De hecho, hay personas que se han dirigido al club de navegación para que se hagan cargo del barco y del amarre porque no pueden hacer frente al gasto.
Así, según el responsable de Incruiser, al club le viene bien porque le ceden el barco y se le da un 10 por ciento de rentabilidad anual al dueño, que, además, forma parte como un socio más. "Hoy no se venden barcos",y añadió como ejemplo que en Palma de Mallorca le vendían "por un euro un barco de lujo de 20 metros con tal de que nos hiciéramos cargo de su mantenimiento y del atraque".