El Baltic Dry Index, por debajo de los 1.000 puntos, tras caer un 40% en dos semanas
El Baltic Dry Index, índice de fletes de buques graneleros y considerado por algunos analistas como un “termómetro” de la evolución de la economía mundial, está cayendo en picado desde primeros de este mes de enero: en la jornada de ayer, día 18 de enero, bajó hasta 926, lo que supone un descenso de un 40% en las últimas dos semanas y 57% desde el 14 de octubre, cuando alcanzó 2.173 puntos, el máximo de los últimos 12 meses.
Los expertos atribuyen este fuerte descenso a las malas condiciones climatológicas reinantes en las dos principales zonas de exportación de mineral de hierro: Brasil y el oeste de Australia. Esto, a su vez, habría provocado un fuerte descenso de la demanda de graneleros capesize y la consiguiente caída de los fletes.
En Australia, unos ciclones interrumpieron el transporte marítimo en los puertos de Dampier y Port Hedland y la explotación minera de las compañías Río Tinto y BHP Billiton.
Asimismo, el gigante minero brasileño Vale informó, el 11 de enero, de que, por causas de fuerza mayor, no podía suministrar parte del mineral de hierro contratado con sus clientes. “Las fuertes lluvias que caen desde mediados de diciembre en los Estados brasileños de Minas Gerais, Río de Janeiro y Espirito Santo están produciendo graves inundaciones y dificultando gravemente nuestras operaciones. Estimamos que, hasta ahora, se dejarán de transportar por mar 2 millones de toneladas de mineral de hierro.”
Esta caída de la demanda de transporte ha provocado una recorte de más de un 80% de los fletes spot de buques capesize, que han caído de 31.542 a 5.336 dólares/día.
El banco noruego de inversión Arctic Securities ha señalado: “Es muy improbable que el mercado se recupere a corto plazo, principalmente por la semana de vacaciones de Año Nuevo en China (destino de alrededor de un 60% de mineral de hierro del mundo), que comienza el 23 de enero. Esto repercutirá en el los buques capesize y frenará las importaciones de mineral de hierro.” Este descenso de los fletes de los graneleros de mayor tamaño está afectando a los de menores dimensiones. Cabe recordar que el BDI se calcula teniendo en cuenta el flete de los fletamentos por tiempo de cuatro tamaños de buques: capesize, panamax, supramax y handysize.
El broker noruego RS Platou Markets añade: “Todos los segmentos de carga seca permanecen bajo presión, con niveles de fletes acercándose a los más bajos de la crisis de 2008-2009. La demanda es muy débil y la flota de graneleros cada vez más grande.”
Según Clarkson, a 1 de enero de 2012, la flota mundial de graneleros comprendía 8.890 buques, un 9% más que un año antes y un 28% más que a comienzos de 2009. Esta flota está creciendo mucho más rápidamente que la demanda de transporte, por haber encargado los armadores un número excesivo de buques antes de que los fletes se derrumbasen a finales de 2008. En la primera mitad de 2012 se espera un aumento adicional de la flota del 4,5%, según la consultora Maritime Strategies International Ltd.
Tras este drástico descenso del BDI, una encuesta a 12 expertos en economía marítima, realizada en la segunda semana de enero por Reuters, la agencia de noticias británica especializada en economía, concluye que el BDI podría situarse en una media de 1.370 puntos en el primer semestre de este año, un 20% por debajo de la media registrada en el último semestre de 2011. Los analistas, procedentes de Citigroup, Nordea, Macquarie y UOB Kay Hian, advierten de que esto dependerá en gran medida del éxito de las medidas del Gobierno chino para reactivar la economía, que deberían detener el desplome de los fletes.