LOS RESULTADOS DE LA CGPM AUGURAN UN NEGRO FUTURO A LA PESCA MEDITERRÁNEA

Oceana muestra su enorme preocupación por las conclusiones de la 37ª sesión anual de la Comisión General de Pesca del Mediterráneo (CGPM), que ha terminado hoy sin aprobar acciones contundentes para remediar el grave estado de los stocks pesqueros. La organización de conservación marina considera que la inercia de la Comisión es un punto de partida negativo para la reforma de su Acuerdo fundacional, que en teoría debería aportar soluciones al declive de los stocks mediterráneos.

“Se trata de un momento crítico para la CGPM, ya que se está revisando su texto fundacional en un momento en que el 92% de los stocks evaluados sufre sobrepesca. Para que el proceso tenga éxito, es imprescindible un fuerte compromiso político de restaurar los stocks y, sin embargo, el primer mensaje que han dado los países mediterráneos es de rechazo de las repetidas advertencias de los científicos. Esto lleva a plantearnos si realmente se pretende construir un futuro para la pesca en el Mediterráneo”, afirma María José Cornax, responsable de Pesca de Oceana en Europa.

La fuerte oposición a la propuesta de la UE de adoptar medidas de precaución por primera vez –incluyendo reducir la presión pesquera de todos los stocks demersales en un 10% como mínimo, como recomiendan los científicos– hizo que la sesión fuera perdiendo cualquier atisbo de ambición y acabara adoptando vagas directrices sin efectos vinculantes.

En lo positivo, el encuentro concluyó con la adopción de unos términos de referencia para reformar el Acuerdo, así como una decisión sobre la gestión de áreas marinas protegidas, lo que constituye un primer paso hacia la protección y conservación de los hábitats marinos de la zona.

“La decisión sobre la gestión de los hábitats marinos abre la puerta a una nueva línea de trabajo que contribuirá a su conservación”, añade Pilar Marín, científica marina de Oceana en Europa. “Sin embargo, este paso solo es el principio del esfuerzo que debe emplear la CGPM para designar nuevas áreas marinas protegidas en los próximos años”.

Dependiente de la FAO, la Comisión General de Pesca del Mediterráneo es la organización responsable de la gestión de todos los recursos marinos vivos del Mediterráneo y el Mar Negro. Creada en 1949 y en vigor desde 1952, esta organización regional de pesca agrupa a 24 países como partes contratantes del acuerdo. Para más información, visitar http://www.gfcm.org/gfcm/about/en (en inglés).