El salmón atlántico muy cerca de la extinción
Ya ha desaparecido de 309 ríos y el 90% de las poblaciones seguras está en sólo 4 países En España, el retroceso del salmón durante los últimos 30 años resulta alarmante y viene despertando una creciente preocupación social. Según los expertos no será posible salvar nuestras poblaciones si siguen gestionándose exclusivamente para su captura.
Según un estudio hecho público en Madrid por WWF/Adena, en vísperas de la reunión anual de las delegaciones gubernamentales de la Organización para la Conservación del Salmón Atlántico Norte (NASCO) en Mondariz, Galicia, el salmón atlántico silvestre ha desaparecido por completo de por lo menos 309 sistemas fluviales en Europa y Norte América y se requerirían acciones urgentes para evitar la extinción de la especie.
Tom Grasso, Director del Programa de Conservación Marina de WWF-EEUU, declaró: "Para salvar al salmón atlántico, los gobiernos deben restaurar los ríos donde la especie se encuentra amenazada o ha desaparecido y tomar medidas para proteger aquellos otros que aún mantienen poblaciones sanas".
El Estado del Salmón Atlántico Silvestre, una evaluación por ríos, informa que de los 2.005 ríos que históricamente acogían a la especie en ambas orillas del Atlántico, los peces silvestres han desaparecido en Alemania, Suiza, Holanda, Bélgica, la República Checa y Eslovaquia.
La especie se encuentra al borde de la extinción en Estonia, Portugal, Polonia, Estados Unidos y partes de Canadá. Cerca del 90% de las poblaciones sanas conocidas se encuentran sólo en cuatro países: Noruega, Irlanda, Islandia y Escocia. En el resto del área de distribución, el 85% de las poblaciones del salmón atlántico silvestre se encuentra en las categorías de vulnerable, amenazada o crítica.
De acuerdo con el equipo redactor del informe, dirigido por Henning Røed de WWF/Noruega, las cinco amenazas principales para estas poblaciones son: sobrepesca, que reduce los stocks por debajo del nivel crítico; presas y otros obstáculos construidos por el hombre que impiden las migraciones de los salmones; proyectos de ingeniería fluvial que degradan los hábitats y alteran los procesos ecológicos naturales; contaminación de la industria y la agricultura; y acuicultura de salmón, que tiene como efecto la erosión del patrimonio genético de la especie por cruzamiento con los especímenes escapados de las piscifactorías que diseminan también enfermedades.
La captura comercial en el mar y el impacto de los salmones procedente de la cría industrial en las poblaciones silvestres son algunos de los asuntos que se discutirán por los países miembros de NASCO. Bill Taylor, Presidente de ASF, dijo: "El problema de las pesquerías marítimas es la imposibilidad de gestionarlas, ya que las redes no discriminan y, por tanto, matan tanto a salmones de los ríos con poblaciones amenazadas como aquellos otros procedentes de poblaciones florecientes. Resulta imprescindible terminar con la pesca marítima del salmón atlántico".
El estudio advierte que si no se aplican medidas preventivas fuertes, continuará la ya catastrófica disminución de las capturas de salmones silvestres. Los investigadores hallaron que las capturas de salmón en todo el Atlántico Norte cayeron más del 80% entre 1970 y el fin del siglo XX, y se encuentran actualmente en el nivel más bajo conocido en la historia. Los salmones silvestres han resultado completamente eliminados de la mayor parte de su área de distribución original y se encuentran pendientes de un hilo en otras muchas zonas.
César Rodríguez Ruiz, de AEMS-Ríos con Vida y Asesor Científico de WWF/Adena, resumió la situación en nuestro país en cuatro ideas fundamentales: "El retroceso del salmón en España durante los últimos 30 años resulta alarmante y viene despertando una creciente preocupación social; no será posible salvar nuestras poblaciones si siguen gestionándose exclusivamente para su captura, ha de ponerse en práctica una gestión para su conservación.
Con base a este informe WWF/Adena y la Atlantic Salmon Federation (ASF) instaran a los países participantes en la Conferencia de la NASCO, que tendrá lugar en Galicia entre los días 4 y 8 de junio, a que den pasos vitales para asegurar la supervivencia del salmón, incluyendo una moratoria de ciertos tipos de pesquerías y mejor gestión de cuencas.