Pescadores de Portomarín (Lugo) dicen que es el año de más mortandad
Los peces con pintas blancas son habituales en el río hace varias temporadas
Los pescadores que habitualmente salen a pescar en el embalse de Portomarín o en alguno de los ríos que desembocan en él aseguran que están ante el año en el que aparece mayor cantidad de peces muertos.
La aparición de animales flotando sin vida en la superficie es bastante habitual desde hace años, pero aseguran que en las últimas fechas están apareciendo más de lo normal.
Los pescadores también explicaron que en otras temporadas los animales que más sufrían mortandad eran los de la modalidad conocida popularmente como Black Blass y que era menos frecuente encontrar muertos a los que denominan peixes o a las truchas. Este año, en contra de lo expuesto anteriormente, el número de peixes que aparecieron muertos es considerable.
Gente que suele navegar en aguas del embalse también defiende los comentarios de los pescadores y afirman con rotundidad que el aumento de ejemplares muertos es notable respecto a campañas anteriores. También manifiestan que no era habitual que las truchas estuvieran afectadas.
Otro aspecto que destacan que ya sucede hace varios años es que comenzaron a detectar decoloración en los peces, lo que los habituales denominan como pintas blancas y que da la impresión de que los animales sufren algún tipo de enfermedad.
Los animales muertos, heridos o atontados estaban fundamentalmente en el río Zamolle, sin que aparecieran focos importantes en otros lugares, aunque un pescador de la zona encontró agonizando una trucha de más de dos kilogramos en el río Seixón.