El Eo repite con el campanu
El río que divide el Principado y Galicia, con dos capturas más, cobra ventaja con respecto al resto en una jornada en la que el Sella también se estrenó con su ejemplar
Alejandro Pérez 'Jano', de Trelles (Coaña), pesca el primer salmón de la temporada en Asturias
El Eo dio por segundo año consecutivo el campanu en una jornada inaugural de la pesca del salmón en Asturias marcada por la escasez de capturas y de agua con respecto a los dos últimos ejercicios. Además de la cuenca que divide el Principado y Galicia, el Sella fue el otro río que vio salir de sus aguas un ejemplar.
El pobre balance, que se completó con dos peces más en el Eo, obedece fundamentalmente a que en 2015 y 2016 la temporada se abrió medio mes más tarde, lo que favoreció la entrada de salmones hasta dicha fecha. En el primero de los casos se precintaron el primer día hábil de la campaña 47 ejemplares, mientras que en el segundo solo se controlaron 15. Como dato, en 2014, con fecha más tardía en la apertura aún, salieron 63.
Hay que tener en cuenta que la escasa cifra de salmones pescados ayer domingo se debe en gran medida a que los ríos presentaron ayer un escaso caudal, que no ayudó precisamente a que picasen.
Los pronósticos, se cumplieron en el Eo que, poco más de media hora después de abrirse la temporada (7.50 horas -la veda se levantó a las 7.15-) dio el campanu en una de sus mejores reservas: el pozo Los Cables del coto Louredal.
Alejandro Pérez 'Jano', de 63 años, fue el afortunado pescador, ribereño de Trelles (Coaña) explica que «lo apuré un poco más de la cuenta, quería sacarlo lo antes posible para ver si era el campanu, pero me llevó levantarlo sobre cinco o siete minutos». Precisó que «en el coto empezamos un poco más tarde a pescar, porque a las siete y cuarto era todavía de noche, y esperé a las siete y media, que se veía algo mejor», «probé suerte con la cucharilla, no me picó nada, puse el cebo y a la primera varada ya cayó».
El salmón, que fue posteriormente vendido en la subasta de Cornellana al restaurtante As de Picas de Gijón por 9.500 euros, dio un peso de 5,790 kilogramos y una longitud de 79 centímetros en el precinto de Xesteira.
Sobre las nueve de la mañana, la segunda captura de la jornada inaugural corrió a cargo de del sobrino del citado Jano, Miguel Pérez, que en el mismo lugar del río Eo (coto Louredal) sacó, también a cebo natural, un ejemplar de 7,280 kilogramos y 86 centímetros de longitud.
El río de la divisoria asturcántabra dio un tercer salmón, al que dio muerte Antonio Mori Cuesta 'Cuco', pescador de Cangas de Onís hermano del conocido Marqués. Pesó 5,2 kilogramos, con una longitud de 77 centímetros.
A las nueve y cuarto de la mañana, salió el campanu del Sella, cuya autoría correspondió a Juan Antonio González, conocido en el mundillo de la pesca como 'el Sastrín de Ribadesella utilizando como cebo la quisquilla, en la zona libre de El Barcu, próxima a Arriondas. El salmón, que fue adquirido por los restaurantes El Campanu por 9.900 euros, dio un peso de 4,200 kilogramos en la báscula del centro de precintaje parragués de Portazgo.
El ambiente en el Sella correspondió al de las grandes ocasiones al ocuparse todos los cotos al mismo tiempo que la zona libre contó con una enorme concurrencia.
En el Narcea las expectativas eran muy buenas, porque en las dos últimas semanas se vieron salmones en algunas de las mejores partes del río y se daba por seguro que habría campanu. En Puente de Quinzanas, a primera hora de la mañana la afluencia era máxima, así como en otras zonas como el Molín de Carbajal. todos los cotos registraron la ocupación de sus correspondientes titulares. Pero, al final no se precintaron salmones en La Rodriga.
Tampoco hubo mucho movimiento en el centro de precintaje de Panes en el Cares. Su guardería vio cómo pasaban las horas y nadie acudió con un salmón. Las condiciones no permiten pescar, el caudal está demasiado bajo.
El Esva pasó la jornada en blanco como en el primer día de la temporada el año pasado.