Las capturas en la costera del bonito son la mitad que hace un año
La costera del bonito avanza este año marcada por la escasez de capturas, mientras cunde la preocupación entre la flota del noroeste español, porque el alejamiento de la especie
A medida que transcurre la temporada, crece el desánimo entre los pescadores del área del Cantábrico, que en muchos casos esperaban salvar el año con el bonito y compensar, por ejemplo, la carencia de recursos como la caballa.
Ante el descenso de oferta, los precios son superiores a los alcanzados en la pasada temporada, y en el caso de la lonja de Burela (Lugo) alcanzan los 4,70 euros por kilogramo, mientras que en 2010 rondaron los 3,30 euros por kilo; en las lonjas de Guipúzcoa oscilan actualmente entre los 3,50 y los 4 euros.
Hasta Irlanda
Pero los pescadores insisten en que esta subida no basta para costear el gasto en combustible y más teniendo en cuenta que los atunes se han desplazado más allá del Golfo de Vizcaya, por lo que para encontrarlos, los barcos deben ir a aguas de Irlanda y pasar cuatro o cinco días en la mar.
Esta situación ha disuadido a muchos barcos y les ha llevado a interrumpir su pesca, a la espera de que en agosto y septiembre mejoren las existencias. El gerente de Armadores de Burela, Miguel Neira, manifestó que, a día de hoy, las capturas "están muy lejos" de las obtenidas en 2010, un 50% o un 52% menos. Neira resaltó que el volumen de negocio es muy inferior al de 2010 y los precios no compensan siempre el gasto de los armadores en carburante.
Burela es una lonja de referencia en las descargas de bonito, porque en ese puerto desembarcan pescado no solo los buques locales sino también los de otras procedencia.