La Asociación de Pescadores «Fuentes del Narcea» prepara las riberas salmoneras
La Asociación de Pescadores «Fuentes del Narcea» está desarrollando una importante actividad de mejora y recuperación de los ríos del concejo de Cangas del Narcea, que no se circunscribe a la limpieza de los cauces y a las repoblaciones piscícolas, sino que alcanza, además, a los elementos culturales y tradicionales vinculados al río, así como a los aspectos sociológicos.
Dentro de este operativo, los pescadores han completado la recuperación de las escalas salmoneras de Fariñas y La Himera, que existen en el río Naviego desde mediados del siglo XX y que, según manifiestan, son la prueba viva de que los salmones representaron una parte importante de la vida en el municipio.
Esta campaña adquiere especial relevancia ante la próxima temporada salmonera, que se abre este domingo. Los pescadores quieren poner de relieve que, tradicionalmente, se pescaban salmones en la parte alta de la cuenca.
La limpieza de las escalas salmoneras ha llevado dos años de trabajo y ha sido una labor complicada, sobre todo en el caso de la de Fariñas, que muchos vecinos ni siquiera sabían que existía. Los pescadores han tenido que recurrir a los más viejos del lugar para recabar historias y anécdotas.
Con estos trabajos, los pescadores de «Fuentes del Narcea» han indagado en la dimensión social de los ecosistemas fluviales. Han hablado con numerosos vecinos, entre ellos algunos que recuerdan cuándo se hicieron estas escalas, y han tratado de poner en valor la riqueza que representan estas construcciones.
Román Herrero Díaz, portavoz y vicepresidente de la asociación, considera que ésta «es la prueba de que todas las especies migratorias confluían aquí» y que tanto salmones como reos y lampreas acudían al río Naviego para cumplir su ciclo reproductor. «Estos peces siempre buscan las aguas más puras», dicen.
Herrero interpreta que estas labores «han de concienciar a la Administración para que acceda a que podamos criar salmones en la estación de alevinaje y, así, ayudar a la zona baja del Narcea». Los salmones no pueden subir hasta el concejo de Cangas debido a los embalses que les impiden el paso, pero la asociación entiende que este problema se solventaría si los peces nacieran en sitios donde siempre lo han hecho. «Si nos dejaran huevas fecundadas, podríamos criarlas y soltarlas luego entre Soto de los Infantes y El Puente San Martín».
Los pescadores señalan que estas especies están encontrando muchos problemas, por causas desconocidas, para remontar más arriba de la afluencia del río Pigüeña al Narcea. Herrero Díaz cree que el ejemplo que están dando de compromiso con el río y la pesca hará que la Administración les tenga en cuenta a la hora de tomar decisiones que afecten a toda la cuenca. Este año han conseguido ser sociedad colaboradora del Principado.
En cuanto a los beneficios colaterales que supone que estas escalas estén presentables, Román Herrero cita «el impulso y el aliciente para la pesca deportiva, pero también para el turismo natural y para los amantes de la fotografía». La sociedad tiene en marcha un proyecto de turismo fotográfico al que le augura un gran recorrido y, por ello, todos sus esfuerzos de recuperación se convierten en beneficios generales para los amantes del río.
Fuente: La Nueva España