Lago de As Pontes de García Rodriguez

En el hueco de la vieja mina de lignito se embalsan 547 millones de metros cúbicos de agua de los acuíferos que le rodean y del río Eume. Todo un mar con una masa de agua dulce con todas las posibilidades para el deporte y ocio náutico.
En su situación actual, alcanza el nivel de rebose, desde que se inició la operación de llenarse en el 2008.
Restituido el régimen hídrico del Eume quedando similar que al inicio de la explotación, los cinco pequeños ríos (Illade, Meidelo, Maciñeira, Uz y Chao) derivados en su momento, a través de un cinturón de canales para evacuar las aguas de escorrentía están a su curso natural, y vuelcan sus aguas directamente sobre el lago. Cuando este rebose, lo hará por un canal en un tramo seco del río Carracedo.
El lago cuenta con una playa artificial en la zona más próxima a la localidad de As Pontes, en forma de media luna y una extensión de 370 m con zona verde y otra de arena (90.000 toneladas de arena de cantera lavada) separadas por bloques. Desde la playa se divisan dos pequeños islotes.
En la labores de regeneración de la antigua mina, en las riberas próximas al lago, se plantaron unos 4.000 árboles (pino de Oregón, roble americano y abedul).
Todo el perímetro lacustre se ha protegido con una escollera de piedras, para evitar la erosión de sus bordes.
Según cálculos de técnicos de Endesa, el fetch que se produce en el lago, y según la dirección del viento, se pueden generar olas de hasta dos metros de altura.
La temperatura estival del lago, alcanzará los 23 grados.
Tan grande en extensión como la ciudad de A Coruña, el lago será la segunda reserva de agua dulce de Galicia, con 547 hectómetros cúbicos, sólo por detrás del embalse de Belesar (655 hectómetros).
Según fuentes de Endesa, el agua es potable y su calidad cumple sobradamente con los requisitos de Aguas de Galicia.
La rehabilitación del hueco minero mediante su inundación supuso la creación de un espacio natural de alto valor ecológico y paisajístico, aunque con cierto cambio en el microclima de la zona, nieblas y mayor grado de humedad, el territorio se enriqueció por la potenciación de usos sociales.
Sin duda el Lago de As Pontes, es un lugar ideal para la práctica de deportes náuticos como el piragüismo, windsurf o kitesurf, vela ligera y vela de cruceros pequeños.

Actualmente se celebran campeonatos de vela aligera.

Cuenta con un observatorio de aves y pantalanes para embarcaciones de recreo.