Ría de Muros y Noia. Vertiente Sur. Portosín. Cabo Corrubedo
Comenzamos esta descripción de la costa S en la Punta Mexilloeira y la playa de Covas sitiadas al E de la Punta Cambrona, límite del mar navegable principalmente para los veleros con orza, pues a partir de ella para el N, manda el banco de la Misela.
La costa hasta Portosín discurre entre pequeños acantilados y playas, la más interesante para fondear es Boa Grande a 1 M escasa de la salida de puntas del puerto de Portosín hacia el interior de la ría, de fácil reconocimiento por la fábrica situada en Punta Cabalo Baixo final por el W de la playa.
La playa de Hornanda, una de las más concurridas de la zona y la punta y playa de Gata son antesala de una de las mejores instalaciones náuticas de galicia y, por supuesto, la mejor de esta ría: el puerto deportivo de Portosín que cuenta con una buena escuela de vela, secciones de vela ligera y crucero con actividad durante todo el año.
Las características de esta costa, y el viento siempre presente hacen de este club un importante punto de atención que ya ha celebrado competiciones nacionales e internacionales principalmente en las modalidades de windsurf, vela ligera y crucero.
Pero además Portosín es un puerto pesquero importante en descarga de pescado fresco, base de una de las más numerosas flotas de cerco de Galicia que capturan entre otras especies la requísima sardina de Portosín.
En el interior del puerto, Portos de Galicia ha instalado dos líneas de pantalanes donde amarran embarcaciones de las listas 3ª y 7ª, con ocupación total y sin posibilidad de encontrar una plaza para tránsito. La dársena cerrada por un dique de abrigo de 630 m orientada al 1er cuadrante con su extremo balizado (f) sirve como muelle comercial. Enfrente y perpendicular a él destaca un contradique de donde salen los pantalanes de Portos de Galicia. En su punta está instalado un servicio de carburante donde podremos llenar de gas-oil y gasolina.
El servicio de carburante sólo funciona los lunes, miercoles y viernes y en horas de la mañana.
En el centro de la dársena vela en bajamar la piedra Miñateira, separada unos 200 m de tierra y señalizada por baliza y boyas(f).
De los pocos handicaps que hemos encontrado en este puerto ha sido la falta de respeto al límite de velocidad de 3 nudos que tienen los pesqueros cuando parten a faenar o llegan de la pesca diaria. Provocan olas y golpes en los costados del barco contra los fingers. Desde luego la opción aconsejada es atracar en el Club Náutico donde se puede dejar el barco con total seguridad, mientras se visita Santiago de Compostela, a 1 hora aproximadamente en autobús o los magníficos parajes que encierra esta ría.
La costa contigua al espigón de Portosín hasta Punta Aguieira es baja, con playas.
La primera y que arranca al S es conocida como Coira, limpia y fondable, solamente en su finalización tiene una piedra que cubre y descubre conocida como la Mula a 150m de la playa
Le siguen Langaño, Pozo y el gran arenal de Aguieira.
Las playas son un buen fondeadero.
Hasta estar a la altura de punta Aguieira el veril de 10 m discurre paralelo a la costa separado aproximadamente 250 m y el de 5 a unos 80 m.
A partir de Punta Aguieira, fácilmente identificable por su pequeño muelle y la construcción que la corona cambia la naturaleza de los fondos, de hecho toda esta punta es sucia con numerosas piedras aisladas en sus cercanías.
Aguas afuera conviene balizar el bajo Rouxas (wp) y más cercano y dentro del veril de 10 m el bajo Ferramental que por su sonda de 6m no sería reseñable pero donde rompe cuando entra mar de fuera.
El frontón de costa rocosa que se inicia en la punta anterior finaliza en Punta Cabeiro (f) cuyo faro con sectores B y R nos avisa del pedregal que existe en la entrada a la ensenada de Porto do Son del que la punta es el límite oriental.
Ensenada de poco fondo y con incontables petones y bajos constituye el típico lugar donde navegar con cien ojos es poco.
De entrada, si nuestro calado excede de 3 m omitiremos el arribar a este puerto y en caso de necesidad sólo con mar en calma.
No os fiéis, si no conocéis bien sus aguas, cuando veáis a pequeñas planeadoras navegando entre las Filgueiras y el Cabezo do Feito o entre el Xibau y tierra, estos marimeros nacieron aquí y llevan toda la vida conociendo marcas, con todo ello también tienen sus accidentes.
No es alarmismo, es la realidad, podría citar más de 17 piedras en la media milla entre el final de la playa de Cabeiro y el Xibau y todas en un área reducida.
Para no cansaros descifrando todos los bajos hacia tierra desde la Laxe de Cabeiro, proponemos una línea de seguridad que en la tabla de peligros la denominamos L. S. E del Son (wp).
Si es importante definir los bajos exteriores que empezando por el N encontraremos: al W del faro de Punta Cabeiro el amplio bajo Xorexo (wp) el más alejado y el bajo Pedrales (wp) de menor extensión entre ambos, el islote Filgueira que vela siempre con arrecifes al SW y S que son visibles en bajamar.
El bajo Angostín que con 8 m de sonda rompe cuando entra mar de fuera al NW del espigón del puerto a 0,4 M y por dentro de él el bajo Xibau (wp).
Desde Punta Sagrada, arranque del espigón del Son en cuya cima se eleva una capilla y hasta el frontón rocoso de Punta Castro y Punta Sofocho la costa discurre totalmente al S, intercalando pequeñas calas con zonas acantiladas hasta llegar a la playa de Arnela, batida por los mares atlánticos pues carece de la protección que proporciona el Monte Louro al interior de la ría.
Pasado el arenal comienza una costa acantilada hasta la pequeña península de Baroña.
En este tramo se encuentra el pequeño faro de Sofocho (f).
En la primera parte del recorrido hasta la playa, los bajos peligrosos para la navegación se encuentran todos dentro del veril de 10 m menos el Rodal de Villar (wp) que se separa unos 560 m. En el frontón de arrecifes hasta el Castro de Baroña las piedras cercanas a la costa, todas dentro de fondos de 5 m son perfectamente balizables por la rompiente, los petones de Alixeiras, Fonsementeiro, Borrón y el Con cubren y descubren y teniendo la simple precaución de navegar con la sonda marcando entre 10 y 6 m navegaremos libres de ellas.
Distinto es el bancal de la Baya y los Moyedores (wp), uno de los grandes bajíos de esta ría del que algo comentamos cuando establecimos las propuestas de rutas de entrada en el capítulo anterior.
Se encuentra al W de Punta Castro (Castro de Baroña) dejando con la piedra de El Con, un pasi de 800 m de ancho, al pie de la pequeña península donde se encuentra uno de los mejores representantes de poblados prehistóricos de Galicia.
Extenso y peligroso (1,12 M de E a W y 0,9 M de N a S), se producen rompientes y arbola la mar en toda su extensión. Si las condiciones de mar lo aconsejan (mar de fondo a partir de 3 m o fuerte marejada) los pasaremos por fuera.
Sólo nos quedan 7 M para finalizar la más norteña de las Rías Baixas.
Su costa continúa en dirección S con sus acantilados rotos por tres arenales Area Longa, Rio Maior y Queiruga, las tres con la mar limpia de bajos pero no fondeables por las fuertes olas que levantan en sus orillas a las que sigue el frontón de Laxe comenzando en Punta Roncadora que larga una restinga que remata en la piedra del mismo nombre al 300º y 500 m de la punta, donde rompe la mar.
A todo este pedregal antes de llegar a las playas de Sieira y Xuño le daremos cierto resguardo, el rebote de mar hace incómoda la navegación y los arrecifes que despide así lo aconsejan.
El frontón está muy frecuentado por pescadores de caña. Las playas que pueden tener olas excelentes son concurridas por surfistas.
La playa Xuño o Muro o Basoñas (se le conoce con cualquiera de estos tres nombres) es un espacio con una riqueza natural y biológica importante, quizás eclipsada por el cercano parque natural de Corrubedo, cuenta con una zona húmeda formada por las lagunas de Xuño y Muro, donde anidan gran cantidad de aves parapetadas tras una barrera dunar.
Llegamos a otro de los puntos claves.
La bravura de la mar en el bancal de las Basoñas, punta Caraixiñas, Laxe Brava y hasta Corrubedo, es de sobra conocido por los navegantes gallegos.
Raro es el día que no sopla viento al igual que la constante mar de fondo, totalmente parecida a la del litoral nor-atlántico trabajando en el bajerío de mayor importancia a la entrada de esta ría, y sobre una costa agreste con playas de fuerte resaca.
El banco de piedras de las Basoñas(wp) tiene 1,2 M de N a S y 1.200 m de ancho, con piedras que velan, como la Basoña grande y otras que nunca, aunque las rompientes que en ellas forma la mar, nos proporcionan un buen balizamiento.
Entre las Basoñas y tierra la canal de 1,2 M de ancho es navegable, se miden fondos entre 10 y 40 m pero tanto el Bajo Nuevo con 8 m al S de Basoñas como el Tremalleira con 10m al W de Punta Caraixiñas lo dejan reducido a media milla.
Con mar llana no necesitamos mostrar atención a estos dos últimos bajos pero con poca mar, la ola sube llegando a romper sobre ellos. Recomendamos pasarlo con buen tiempo.
Por dentro de la Tremalleira y más cercanas a la punta Caraixiñas encontrareis varias piedras, por el NW el bajo Borrón (wp) y por el W el arrecife de Feltro que remata en una piedra siempre visible.
Continua la costa al S con dos playas separadas por piedras hasta la punta Laxe Brava, antesala de la ensenada de Balieiros, cara N del Cabo Corrubedo.
Aquí cuidaremos de balizar el bajo Teiláns (wp), las razones son varias: Rompe la mar a poco que entre y nos cae muy cercano a la derrota una vez remontado Corrubedo si decidimos pasar entre Basoñas y Tierra.
La Península de Corrubedo donde mandan los peñascos oscuros en la orilla y de planicie arenisca en sus zonas más altas, cuando se baraja la costa próxima, aparece como una península baja y arenosa. La reconocemos fácilmente tanto por el faro como por los arenales de su extremo N.