De Cabo Corrubedo a Punta Falcoeiro. Bajos de Corrubedo
Este trozo de costa entre rías es vía de paso o recalada para aquellas embarcaciones que procedan del N con destino a cualquiera de los puertos o rías o aquéllas que con destinos más meridionales procedan de las Rías Baixas del S.
Tramo de costa singular, en sus aguas encontramos una de las islas pertenecientes al Parque Nacional de las Islas Atlánticas, además de situarse en estas latitudes los bajos de Corrubedo (ya de por sí con importancia suficiente para dedicarles atención por los muchos naufragios y averías que provocaron) y con mención especial a un paraje especial como es el complejo dunar e intermareal del Parque Natural de las Dunas de Corrubedo.
Del Cabo Corrubedo parte un frontón peñascoso con dirección SE que finaliza en Punta Praseu a 1,2 M.
En las aguas del cabo del NW al S fondean arrecifes que avanzan hacia el mar unos 425 m, distancia a la que se encuentra aproximadamente la isobática de 10 m.
Navegar por sus cercanías no implica problemas con buen tiempo y mar, y esta segunda condición es imprescindible ya que a poco mar de fondo que venga de poniente la ola comienza a subir a unos 600 m de las piedras del cabo.
Especial atención tendremos en las piedras más avanzadas que son de N a S: por el NW la Laxes do Forcado (wp) el más foraneo con 2 m de agua.
Por el S y a unos 300 m la Piedra del Forcado que vela siempre.
Casi en el mismo meridiano que las anteriores, las piedras As Polveiras (wp) y finalizando el contorno por el S del faro la piedra Vilán (wp).
Desde el S del faro hasta Punta Praseu podemos navegar muy cerca de la costa, sólo dos obstáculos nos impiden atracarla: los arrecifes de la punta Posalgueiro (wp) y al S de Punta Praseu una piedra que vela en bajamar llamada Bofiño (wp).
Bajos de Corrubedo
Así conocemos a la cadena de bajos, petones, piedras y menores sondas que fondean o velan al SW del cabo, avanzando mar adentro hasta más de 3 M.
Entre los grupos de bajos hay pasos por donde podremos navegar.
La cadena reaparece ya mar adentro en las Pozas a 4,5M al 258º, sus sondas entre 20 y 40 m entre fondos de 80, 90 y 100 m en condiciones normales no nos preocupan pero sí es necesario saber que en malas condiciones de mar, a partir de fuerte marejada a gruesa, rompe sobre ellos.
Detallaremos por orden de proximidad a tierra y de N a S:
A Marosa (wp) y su Touza al 185º y 1,1 M del faro de Corrubedo. Siempre la baliza la mar al romper a menos que ésta sea completamente llana.
Los conocidos como Bajos de Corrubedo (wp) de 1,5M de E a W y 0,5M de N a S están formados por el Rinchador, Tomasa, Cobos, Baleas, Panarros, Reiriz y Praguiña. Este bancal es tremendo, los bajos están entre canales donde se sondan entre 10 y 30 m, podéis ver a algún pesquero aventurarse a pasar entre ellos pero si desconocéis las marcas no es conveniente hacerlo.
La mar levanta y rompe con mucha potencia, con mar de fondo de 3 m la espuma ocupa todo el bajo, algunas piedras como el Rinchador, Tomasa velan siempre y balizan parte del peligro, otros como los Cobos, Baleas a media marea, en la Praguiña se ve la piedra cuando rompe la ola y el resto aunque se midan 12 m de agua como en los Panarros o los 10 como el Reiriz son igualmente peligrosos.
El segundo grupo de peligros al SE de los bajos de Corrubedo lo forma el también extenso bancal de los Pragueiros, Airoso y Meáns.
Los Airosos están al N del Pragueiro, sus fondos de 9 y 11 m no constituyen un peligro excepto cuando hay marejada.
El Pragueiro (wp) está sembrado de piedras y con el bajo Gallego a su W, con un poco de mar, todo él es una rompiente.
A 500 m al E destacan las piedras visibles del bajo Dianteira (wp).
Ya sólo nos restan el último bajo de los considerados exteriores a la ensenada de Corrubedo, al S del Pragueiro, los bajos de Meán (wp) y Canteiro (wp) que nos marcan el límite de estos peligros para la navegación.
Atención: la luz del faro de Corrubedo baliza con su sector rojo los bajos de A Marosa, Corrubedo, Pragueiros, Meán y Canteiro.
Atención: Con mar de fondo o de viento fuerte no pasaremos entre el grupo de bajos Pragueiro y Meán y el islote de Sagres, el freu con 35 m de agua es todo una rompiente.
Costa de la ensenada de Corrubedo
Una vez detallados los peligros más foráneos de las proximidades del cabo y ensenada, proseguimos con la costa que discurre desde Punta Praseu.
Entre ella y Punta Graña a 2,6 M al 150º, donde comienza el pedregal y acantilado de Punta Falcoeiro, se adentra una ensenada totalmente abierta a los vientos del 3er y 4º cuadrante, poco protegida de los del 2º, con un gran arenal al fondo muy aplacerado batido por olas considerables.
El puerto de Corrubedo que queda cási en seco en bajamar se encuentra en el encabezamiento N de la ensenada al abrigo de Praseu, después de la playa de Prado, donde podemos fondear en verano sobre piedra y arena con una entrada limpia. Corrubedo se encuentra protegido por un dique de 190 m que finaliza al NE, balizado en su punta (f) con luz de sectores y construido sobre el arrecife que arranca al N de la playa. No podemos atracar en este puerto que dispone de rampa de varado pero sí fondear dentro de puntas, controlando la restinga en la que se asienta el dique y que sale unos 200 m hacia el S, conocida como piedra Guimerán y enfrentado, formando la bocana, las piedras Concheiro.
Si fondeamos lo haremos más pegados a tierra que al dique sobre fondos entre 4 y 5 m, como referencia, aproados a la misma dirección que arranca la rampa del fondo del puerto, un poco más al N.
La dedicación del puerto es totalmente pesquera, fuera de la temporada estival no es un puerto seguro, con mar de SW el fondeo es inaguantable.
A partir de las piedras Concheiro donde se asienta Corrubedo, comienza el arenal de la playa de Ferreira, alterado por el islote Ferreira y la salida al mar de la Lagoa de Carregal.
Si la mar nos permite navegar por las cercanías de esta impresionante playa tendremos presente el islote Páramo y los bajos Balieiros a 400 m al NNW de las piedras Páramo.
Sigue la playa en dirección S hasta Punta do Corvo, cerca de ella desagua a la mar la Lagoa de Vixán.
A 600 m al SW de la del Corvo, se hallan las Puntas del Bravo, Lamó, y Graña, de 22 m de elevación, caracterizada por el peñasco Presiñán, que corona su altura, formando el límite SE de la ensenada de Corrubedo.
Todo el frente de costa hasta Falcoeiro es un semillero de piedras y arrecifes que velan entre sondas de 9m en su primera mitad las piedras Bravo, Congreiras y Feitoso (wp). El único punto abordable de este trozo de costa es la playa d’Area Basta, situada cerca de la punta con el mismo nombre y próxima a Punta e Islote Falcoeiro.
Para acceder a esta pequeña cala tendremos presentes dos bajos alejados de la costa.
El primero al W de esta punta conocido como Piedra Roncosa (wp) y el Bajo Roncoso (wp), navegaremos por el N de la piedra Roncosa negociando el freu de 800 m que deja este bajo con la piedras Feitosa con fondos de 14 m que disminuyen a 5 entre puntas.
Punta Falcoeiro, situada a 1 M al S de la de Graña, está formada por un escarpado de 26 m de altura.
Su contorno de mar es muy sucio, la punta despide hacia el S multitud de islas, peñascos y bajos que emergen 0,3 M al SSW y forman el grupo de las islas Sagres.
Falcoeiro es el comienzo por el N de la ría de Arousa donde la costa toma claramente la dirección NE cara al interior.
El Islote Falcoeiro está a 200 m al W de la punta, es de forma cónica. Por fuera de él, y a 150 m del islote, velan las Piedras Conles Queixada.
Al S y SE de Falcoeiro el islote Toran, y la piedra Touza E, con 2 m de agua, y al W las Laxes de Falcoeiro (wp) piedras que quedan cubiertas con la marea y situadas más al S formando el límite N navegable del conocido como paso de Sagres, el más angosto canal de acceso por el N a la ría de Arousa y del que hablaremos posteriormente.
Recomendamos no navegar a tierra de estos puntos, aunque observemos a muchas pequeñas embarcaciones de pesca artesanal hacerlo entre las piedras que despide la costa desde Aguiño a Falcoeiro, incluso por dentro del Torán, muchos mariscadores lo hacen saliendo de Aguiño, pero nuestra experiencia nos indica lo contrario, la posición de muchos bajos y piedras tanto en las cartas electrónicas como de papel, quizas por la pequeña diferencia que nos da el GPS y la multitud de piedras avalan nuestra desconfianza.