Ondarroa: Boca de arena entre el Artibai y el Cantábrico
En las riberas de Artibai, besada por el Cantábrico y a sus espaldas un terreno abrupto por donde se abre paso el río, uno de los pueblos con más sabor marinero y pescador de Euskadi.
La Villa de Ondarroa pertenece a la comarca de Lea-Artibai. Pueblo pesquero donde intensamente podemos encontrar las peculiaridades sociológicas y culturales propias de los puertos vascos, y donde por sus características físicas entre el mar y la montaña encontraréis una belleza natural sorprendente desde su litoral con acantilados abruptos, destacando la denominada Peña del Fraile y hacia el interior la continuación del macizo del Parque Natural de Urkiola, como mirador, al Norte del mar Cantábrico.
Su casco viejo con el mar y el medievo presentes en las inconfundibles calles estrechas y empinadas. Desde el Puente Viejo sobre el río Artibai hacia la Torre de Likona, del s XV, o la iglesia de Andra Mari (1462) construida sobre la roca y el antiguo Ayuntamiento, con su fachada toscana.
Si nos sentimos con fuerza y subiendo una cuesta bastante empinada, dejando atras las ermitas de San Juan y Santa Clara llegamos a la iglesia de Nuestra Señora de la Antigua para contemplar el gran panorama que Ondarroa nos ofrece.
El baño, para quitarse el calor, en la playa de Arrigorri, cási siamesa de la vecina y guipuzcoana playa de Saturraran, perteneciente a la localidad de Mutriku.
Que decir de la gastronomía. Nadie puede decir que se come mal en esta tierra y Ondarroa, por supuesto entra en el mismo saco. Es posible la degustación de cualquier plato típico del país, la carta va desde un rico pescado como la merluza a la ondarresa hasta un estupendo chuletón.
Las fiestas patronales, "Andramaxak", tienen lugar del 14 al 17 de agosto, y dan comienzo con la bajada del popular personaje "Leokadi". El último día, denominado "Día del marinero", es tradicional que todos los asistentes vistan el clásico atuendo de los pescadores.