Un año de récord “Vestas Sailrocket2”, volando a 65,45 nudos a vela
En 2012 Paul Larsen y su equipo lograron superar la barrera de los 60 nudos de velocidad a vela en 500 metros con el Vestas Sailrocket2. Establecieron tres récord seguidos en 59,23 nudos, 59,37 nudos y finalmente 65,45 nudos.
Tas dos años de sequia, tres récords seguidos. Es lo que logró Paul Larsen a bordo del Vestas Sailrocket2 en 2012, después de que en 2010 el estadounidense Rob Douglas lograse los 55,65 nudos con un Kite-board en las aguas de Luderitz, Namibia.
Larsen y su equipo han estado trabajando durante unos trece años en lograr un récord tan contundente, superando la barrera de los 60 nudos de velocidad a vela, sobre la distancia de 500 metros, últimamente dominada por los Kite-board o Kite-surf. Un esfuerzo que la ISAF lo ha reconocido al nominarle como uno de los regatistas en 2013.
Antes del actual Vestas Sailrocket2 hubo una anterior embarcación, que fue construida en 2005 y en la que estuvo implicada varios estudiantes de Arquitectura Naval de la Universidad de Southampton. Más tarde se construyo el actual velero con el que Larsen ha logrado en 2012 alcanzar la velocidad máxima de 65,45 nudos en aguas de Walvis Bay, también en Namibia.
Y estos días Larsen y su equipo están de aniversario, hace un año que han logrado ese espectacular récord a bordo del Vestas Sailrocket2. Él pretendía que el esfuerzo de lograr esta velocidad debería de ser mucho más alta que la alcanzada por los Kite-boad en 2010, con 55,65 nudos; o la del “Hydroptere” con 51,36 nudos en 2009; y lo ha conseguido.
Las velocidades, y fecha de los récords, son las que tiene validadas la World Saling Sped Record Council (WSSRC).
Superar los 65,45 nudos de velocidad a vela costará mucho esfuerzo. Ahora la referencia mundial es el Vestas Sailrocket2, ya lo dijo otro caza récords como es Alain Thebault, creador del súper conocido trimarán “Hydroptere”.
Esperemos que las pocas horas que navegaron juntos Paul Larsen y Sito Avilés, a bordo del Clase C Sintent Blue, durante la Litlle Amercia´s Cup de 2013, el diseñador español le hubiese socavado algún secretillo velocístico.
c) Dury Alonso