ACOSO, DERRIBO Y LEÑA DEL ÁRBOL CAÍDO - ARTICULO PUBLICADO EN ABC.ES/VELA EL DÍA 30 12 2015
Articulo publicado en abc.es/vela el 30 12 2015.
http://www.abc.es/vela/opinion/acoso-y-derribo-y-lenador-del-arbol-caido/
Javier Rodríguez Santos
Ex vicepresidente económico de la RFEV
La opiníón de...
Acoso, derribo y leña del árbol caido
ABC VELA / MADRID
30/12/2015 - 11:35 H.
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A la vista de sus declaraciones en un medio digital, parece que la dirección olímpica de la RFEV, quizá ante la ausencia de resultados en las disciplinas clásicas de la vela se está concentrando, dado el éxito arteramente obtenido en el acoso y derribo del presidente de la RFEV, en hacer leña del árbol caído, en la modalidad hipocresía, como más abajo glosaré. Por respeto a los cientos de deportistas que ensalzan este deporte como el paradigma del esfuerzo personal y el “fair play” y como antiguo responsable de las cuentas de la RFEV que ahora se intentan aviesamente falsear y, sobre todo, en honor a la verdad, debo poner de manifiesto los datos objetivos, la verdad pura y dura sobre las cuentas de la RFEV en los ejercicios 2013 y 2014 de las que tengo cumplido y exacto conocimiento, por la función que, en esos ejercicios, desinteresadamente, he ejercido.
Las Auditorías encargadas por el CSD correspondientes a los ejercicios 2013 y 2014, de las que es responsable el presidente criticado, ofrecen, por primera vez en la historia de la institución, una opinión limpia y sin salvedades de los estados financieros presentados por la RFEV. Por cierto, aunque las del 2014 están formuladas por la directiva cesada en 2015, están firmadas por la nueva directiva. Esto es un hecho. (Aunque parece ser, sorprendentemente, que en la última reunión de la Comisión Delegada no se hayan presentado tal auditoría del ejercicio 2014 que, me consta, está finalizada desde Octubre de 2015). El presupuesto de la RFEV para 2016, fue formulado igualmente por la antigua directiva y aprobado por el CSD. Es el presupuesto que, discutido y denostado con ocasión del “acoso y derribo” del presidente elegido, rige actualmente la actividad de la RFEV, sin reformas ni modificaciones. Esto también es un hecho.
Las Asambleas de la RFEV aprobaron, con los presupuestos de 2014 y 2015 los salarios de los empleados de la RFEV, y en párrafo destacado, tanto el del presidente, como el del director deportivo que hipócritamente se queja por la retribución del presidente cuando él mismo recibe una cantidad superior, sin dedicación exclusiva. En efecto, ha facturado a razón de 96.800 euros anuales a la RFEV (incluido IVA), además de percibir las dietas y gastos de desplazamiento que él, como no residente en Madrid, al igual que el presidente, ha devengado. Esto son datos, no opiniones ni juicios de valor. No se si el salario del presidente elegido democráticamente, que aprobó la Asamblea de la RFEV, era mucho o poco, ni si lo es el del director deportivo, que no ganó su puesto por oposición ni por concurso de méritos, ya que ha sustituido a otro con mayores méritos que él y que ha sido injustamente defenestrado al día siguiente del éxito del “acoso y derribo” (Jan Abascal), sino que obtuvo su puesto por designación directa del presidente que tanto ha criticado.
Si no hubiera mala intención, sería de una frivolidad imperdonable aventurar que las cuentas de 2014 son falsas porque hay facturas en los cajones sin contabilizar por importe de 340.000 euros, como se afirma o que las existencias contabilizadas son “inexistentes”. Este hecho, si fuera cierto, constituiría un delito de falsedad en 1 documento público de los responsables, que son por cierto los firmantes de las cuentas, y si no fuera cierto, constituiría la imputación falsa de un delito lo que es, a su vez, delito. De pasada, esta insólita afirmación desacredita además, a todo el sistema de gestión del dinero público que subvenciona la actividad deportiva de la vela, particularmente a la inspección del CSD que, lejos de asistir como convidado de piedra al banquete del despilfarro, como se quiere hacer ver, sigue muy de cerca, como debe ser, el destino de los fondos públicos que administra. El hecho cierto es que la afirmación es falsa absolutamente, no hay una sola factura recibida en los ejercicios 13 y 14, no contabilizada. Espero del que frívola o arteramente lo ha afirmado, que o bien se retracte, o que ponga de manifiesto públicamente los datos, las facturas por entregas de bienes o prestaciones de servicios a las que se refiere. De lo contrario quedará bien claro el nulo valor de su palabra, que, como el de su bonhomía, para algunos ya está muy claro.
Al lado de las mentiras no podían faltar las medias verdades, esta vez para desvirtuar el éxito de organización del campeonato del mundo de Santander 2014, imputando unos resultados negativos de 400.000, a mala gestión del responsable federativo, ocultando de nuevo, los hechos y manipulando la interpretación de las cifras, para disculpar los nulos resultados deportivos. El resultado del campeonato ha sido objeto de una auditoría especial del CSD que se refiere al conjunto de los ejercicios de preparación y ejecución: 11, 12, 13 y 14. Los resultados negativos se produjeron en la fase de preparación del campeonato, en los ejercicios 11 y 12 y tuvieron su reflejo en las cuentas anuales de esos ejercicios, aprobadas por la Asamblea. En los ejercicios 13 y 14, de los que responde el presidente criticado, los gastos se ajustaron milimétricamente a los ingresos dando lugar incluso a un pequeño beneficio. Achacar a la mala gestión del gestor que entra en el 13 las pérdidas del 11 y 12, constituye otra falsedad malintencionada.
Por cierto, para poner todos los datos sobre la mesa: el resultado negativo de esos primeros ejercicios fue una aportación aprobada expresamente en Asamblea de la RFEV en 2011. Además, hay que poner de manifiesto que el presupuesto de Santander 2014 contaba con una aportación de 2 millones de euros del CSD comprometida por escrito por este organismo en 2011, que en 2012 fue retirada totalmente, de forma que el CSD no aportó nada a la financiación del campeonato.
En todo caso, nuestro querido deporte no gana nada y pierde mucho con estas hipócritas invectivas. No conviene olvidar que el Estado destina del orden de 3.500.00 euros anuales a la Alta Competición en vela, 14 millones en una olimpíada. Y que la retribución de los responsables técnicos y de los deportistas sale de los impuestos de todos y se detrae de otras urgentes necesidades. Retribuir con casi 100.000 euros a un director técnico sin dedicación exclusiva, o entre 70.000 y 80.000 (elevando al bruto lo percibido libre de impuestos) para un deportista, puede que no sea mucho. Puede que, por ejemplo, a Sir Ben Ainslie le parezca una miseria, pero con él colaboran empresas privadas, Henri Lloyd, SOS, etc., gracias, entre otras cosas, al prestigio en su país de este deporte. Es difícil que en nuestro país alguna empresa se preste a colaborar con la 2 supuesta “Cueva de Alí Babá” con que algunos pretenden identificar a la RFEV, para justificar sus ambiciones personales y la carencia de resultados deportivos.
Lo menos que se puede pedir a los responsables deportivos, a cambio del considerable esfuerzo que realiza el Estado para retribuirles y las expectativas de todos los que practicamos este deporte, es que se comporten deportivamente, es decir: que dejen de achacar la ausencia de resultados a la falta de medios por el supuesto descontrol de las finanzas del deporte, y se empleen a fondo en su cometido preparando, a tiempo completo, las disciplinas olímpicas clásicas y aparten del ámbito de este deporte, que debe ser paradigma de limpieza y deportividad, las conspiraciones, las retorcidas justificaciones, las mentiras, las rencillas personales y los rencores sociales.